Esta Madonna puede ser una de las dos Vírgenes con Niño que Leonardo comenzó en octubre de 1478, como él mismo señaló. La otra sería
la Virgen del clavel en Múnich. Parece que la Madonna del Hermitage fue la primera obra pintada por Leonardo con independencia de su maestro, Verrocchio y con el uso del óleo, la nueva técnica de aquel tiempo. El Museo Británico posee dos esbozos preliminares para esta obra.
Siempre era una obra muy popular y copiada por artistas jóvenes italianos, incluido Rafael. Su versión,
la Virgen de los claveles, fue adquirida en 2004 por la Galería Nacional de Londres.
Al mismo tiempo, es una de las obras menos estudiadas de Leonardo. Sabemos que en el siglo XVI esta pintura estaba en la casa florentina de Matteo y Giovanni Botti. Luego apareció solo en 1908 como la parte del dote de la esposa del famoso arquitecto Leon Benois, el representante de una familia artística importante en la historia del arte ruso. El les dio su apellido a la esposa y a la Madonna.
¿Como apareció la futura Madonna Benois en Rusia? Aparentemente fue traída a Rusia desde Italia, ¿pero cuando?
Decían que el viejo señor Sapózhnikov, el padre del suegro de Leon Benois, compró el cuadro de unos músicos vagabundos italianos en Astracán, pero parece que es solo una bonita leyenda familiar.
La otra versión, que ha surgido recientemente, es más probable. Según ella, Sapózhnikov compró la pintura en 1824 en una subasta en que vendían las propiedades del General Alexei Kórsakov, pagando 1400 rublos. Kórsakov era un aficionado del arte, su colección contaba con las obras de Tiziano, Rubens y Rembrandt entre otras, pero después de su muerte, su hijo decidió a venderla. En los años 1790 Kórsakov visitó Italia y hubiera podido comprar allí la Madonna de Leonardo. Hay que mencionar que el Hermitage también tomó parte en esta subasta, donde compró unas obras de Millet pero ignoró este cuadro humilde italiano.
¡Cuando Leon Benois demostró su restaurada Madonna en una exposición del arte europeo de las colecciones privadas de San Petersburgo en 1908, fue una sensación! El curador general del Hermitage, Ernst von Liphart, confirmó la autoría de Leonardo.
En 1912 los Benois decidieron a vender la obra y la enviaron a Europa para justificar la autenticidad otra vez. Los mejores museos del mundo querían comprar la obra. Los hermanos Duveen, anticuarios influénciales de esa época, ofrecían un buen precio de cerca de 1 millón de dólares (500 000 francos), pero los Benois aceptó la propuesta del Hermitage y la familia real rusa, para que el cuadro se quedara en Rusia. Desde el año 1914 nuestro museo principal posee dos obras maestras de Leonardo. ¿No son pocas, verdad?
Aunque ahora parece que la historia de la
Virgen con el niño y flores de los últimos 250 años está más o menos clara, no sabemos nada de su vida entre los siglos XVI y XVIII.
¿Donde fue escondida esta Doña sonriente y misteriosa? Ojalá, algún día lo sepamos. Quien sabe, puede ser, que entre nuestros leedores hay uno quien descubrirá esta u otras enigmas de Leonardo, ¡y hay muchas!
¡Ven a San Petersburgo para
visitar el Hermitage que esconde muchas historias interesantes y misteriosas! ¡Si quieres saber más de alguna obra de la colección del Hermitage,
pregúntanos!